martes, 12 de junio de 2007

La Apuesta de Dora Moro, fragmentos

......

Los tobillos encadenados a la prudencia, gruñen
mientras las manos a cara de asombro lavan,
y ¿para qué?
¿Qué necesidad tengo de este azar?
¿él decide si mi suspiro es de orgasmo
o de muerte?

......

Me quedo.

no sé quién la bella, ni la bestia,
me apago de a poco rinconcito escarlata
a comprender que la duda, la sed, la mentada de madre,
son espejos del pasado, custodin las ganas,
quién sabe por qué cosa o por qué mala jugada,
por mala suerte o buen tino.

.......

Y luego un buche de tinto
el grito a la mama chiquita
esa que viene y acaricia lo rojo.

Como de buena cepa callarse
como de buena cuna las niñas no abren las piernas.


.......


(La Apuesta, Dora Moro, 2007 Alforja Poesía)

3 comentarios:

indira Isel torres CRux dijo...

Què hay de nuevo Èsaù, què tal el calor.....
saludos.
indira

Esaú Hernández dijo...

Qué onda Indirotsa. Tanto sin saber de usted, cómo van esos cuentos, que -me han contado- te quedan muy bien. A ver cuándo le organizamos una lectura en público. ¿O se aprieta?

indira Isel torres CRux dijo...

Pues no sè quièn le echò muchas mentirillas, pues organiza algo y le entramos.